La alimentación del bebé es uno de los temas que más preocupan a los padres y, sobre todo, cuando pasan de la lactancia a las papillas. El paso de líquido a sólido es un cambio importante para el pequeño y fundamental, ya que, conforme va creciendo necesita incluir en su dieta, nutrientes que son necesarios para su crecimiento y desarrollo.
Aunque en sus primeros meses de vida, su alimentación se basa exclusivamente en leche, a partir de los cinco meses y medio o seis meses aproximadamente, habrá que empezar a pasar a la alimentación sólida.