Candidiasis vaginal en el embarazo ¿Qué hago?

Casi todas las mujeres sufren en algún momento de su vida candidiasis vaginal, una infección en la vagina por hongos microscópicos del género candida. Esta infección es aun más habitual en las mujeres embarazadas, ya que su nivel de estrógenos hace que los hongos se desarrollen más rápidamente, y se adhieran mejor en las paredes de la vagina.


Síntomas de la candidiasis vaginal


Si se sufre algunas de las molestias que se detallan a continuación, una embarazada puede empezar a sospechar que padece una infección de candidiasis vaginal:

– Picor, ardor, enrojecimiento e hinchazón de la vagina y los labios vaginales

– Flujo vaginal blanco y espeso

– Molestias al tener relaciones sexuales y al orinar

– La mujer debe comunicar a su ginecólogo si tiene estos síntomas y, por lo tanto, cree que sufre esta infección.

Después de analizar una muestra de su flujo, el médico confirmará el diagnóstico y aplicará un tratamiento.


Cómo tratar la candidiasis vaginal en una embarazada


Una mujer embarazada no puede tomar antibióticos fungicidas por vía oral, pero sí en forma de crema o de supositorio. El ginecólogo valorará cual de estos medicamentos es más apropiado para la infección concreta de cada caso.

Hay que tener en cuenta que estos medicamentos no hacen un efecto instantáneo, así que muchas veces habrá que recurrir a trucos como la aplicación de una bolsa de hielo, para paliar los síntomas tan molestos que tiene la candidiasis.


Efectos de la candidiasis en el bebé


Sufrir una candidiasis en el embarazo es muy incómodo para la futura madre, pero no representa ningún peligro para el feto. Solo en el caso de que se tenga esta infección en el momento del parto, puede contagiarse al niño.

En el caso que el bebé contrajera candidiasis al nacer, se le manifestaría de manera bucal. No hay que preocuparse, porque no se trata de una enfermedad grave, y tiene un tratamiento fácil.


La prevención de la candidiasis vaginal


La candidiasis es una infección por hongos, con lo que conservar la zona genital seca es una buena medida de prevenirla, además de intentar mantener la flora vaginal equilibrada.

Para prevenir esta infección también es importante tratar de evitar la ropa interior ajustada, dormir sin braguitas, y quitarse la ropa interior húmeda o sudada. De igual modo, hay que evitar situaciones que pueden contribuir a la irritación de la zona genital, como los baños de burbujas, los jabones perfumados, el detergente perfumado para lavar la ropa y los productos en espray o aerosol, para la higiene femenina

Finalmente, hay que señalar que incluir productos lácteos con Lactobacillus acidophilus en la dieta puede ayudar a mantener el equilibrio bacteriano en los intestinos y la vagina.

Si una mujer está embarazada y muestra síntomas de candidiasis vaginal, debe consultar a su ginecólogo para que le de el tratamiento adecuado, destinado a evitar la posibilidad de que se convierta en una infección crónica.

Con la medicación adecuada también se conseguirá que no aparezca una infección secundaria , provocada porque el rascado intenso llegue a agrietar la piel de la zona genital.