¿Puede la madre transmitir al futuro recién nacido su estado de ansiedad? Sí, efectivamente el estado emocional materno provoca alteraciones fisiológicas en la mujer que inevitablemente repercutirán en el feto de igual manera que lo hace su forma de alimentarse o las sustancias tóxicas que consuma.
Según la Teoría de la Programación Prenatal, durante el desarrollo de la gestación, se programan los sistemas biológicos para el desarrollo de la vida adulta según las características del ambiente, es decir del medio en el cual se desarrolla; la madre.
Además, algunas investigaciones avalan que los miedos durante el embarazo se asocian con una menor capacidad de atención en el lactante.(Guteling 2003)
Los expertos que han investigado el tema aseguran que la ansiedad materna durante el embarazo puede producir problemas de conducta y emocionales en los niños a largo plazo (O’ Connor 2002).
Por todo ello, es importante detectar precozmente los cuadros de ansiedad, no sólo por el sufrimiento que conlleva para la madre, sino por los efectos de por vida que pueden darse en el futuro recién nacido.
Los investigadores afirman que disminuir la ansiedad materna en el embarazo puede tener un efecto protector preventivo de la salud mental infantil.
¿Por qué puede surgir ansiedad durante el embarazo?
Una mujer embarazada tiene necesidades a nivel afectivo y personal diferentes a una mujer que no lo está. No hay que olvidar, que además de todos los cambios físicos que representa la gestación, estamos ante un cambio vital. Nuestra vida va a cambiar con la llegada del bebé.
Entre las causas más frecuentes de ansiedad en mujeres embarazadas encontramos:
– Temor por la inexperiencia, no ser capaz de cumplir el rol de madre adecuadamente.
– Miedo a morir en el parto y al buen estado de salud del bebé.
– Sentimientos de vulnerabilidad y baja autoestima por los cambios físicos de la gestación.
– Estrés producido por las demandas de la situación de embarazo (preparar todo lo necesario para el bebé, controles médicos, trabajo…etc).
Atravesar momentos de nerviosismo durante el embarazo, es totalmente normal, cuando los síntomas se presentan de forma continuada o afectan a la realización de las actividades cotidianas de la mujer, es cuando debemos considerar la consulta a un profesional.
¿Cómo se presenta la ansiedad durante el embarazo?
Los síntomas característicos de ansiedad son:
– Preocupación excesiva.
– Dificultad para controlar ese estado de preocupación.
– Temblores y sacudidas.
– Dolores o entumecimientos musculares.
– Sequedad de la boca.
– Manos frías y húmedas.
– Sudoración.
– Taquicardias.
– Dificultad para respirar, sensación de opresión en el pecho.
– Mareos.
– Sensación de vértigo.
– Visión túnel.
– Sensación de irrealidad.
– Parestesias (adormecimiento de manos, boca..etc).
– Náuseas.
– Diarrea o dolor de estómago.
– Dificultar para tragar, sensación de nudo en estómago.
Durante el embarazo, puede mostrarse una conducta característica denominada “síndrome del nido” que puede utilizarse para calmar la ansiedad. Consiste en la aparición, durante el último periodo del embarazo, de obsesión por preparar la habitación del bebé, limpiar y ordenar otras estancias de la casa, todo ello con una gran actividad poco acorde al periodo de embarazo en el que se encuentra.