Llega el verano y para las embarazadas, a veces, puede resultarles un poco complicado encontrar la ropa de baño con la que se sientan cómodas y favorecidas. Sin embargo, lo cierto es que existen muchas opciones, lo que, aunque por un lado es una ventaja y, por otro, en ocasiones la mujer no sabe cuál puede ser el mejor modelo.
Lo importante es que se sienta bien con la ropa de baño que elija, tanto a nivel estético como en cuanto a comodidad y confort.
La comodidad y confort son el aspecto clave para elegir la ropa de baño premamá
En cuanto a este último aspecto deberá tener en cuenta ciertas recomendaciones.
Así, será muy importante que al hacer esta elección busque la máxima sujeción en las tres zonas claves, es decir, en el pecho, la tripa y las caderas. Además, también deberá prestar atención y confirmar que el bañador se adapte fácilmente a los cambios de su cuerpo, ya que en poco tiempo irá aumentando su tripa. De este modo, los elásticos deberán ser firmes pero sin llegar a comprimir y hacerle sentir demasiado ajustada.
Por otro lado, apostará por establecimientos en los que no le pongan problemas para llevárselo a casa antes de comprarlo, ya que la mejor opción será que, antes de adquirirlo, pueda probárselo tranquilamente y cómodamente en casa, así como ponérselo y andar para comprobar si se adapta bien a los movimientos, especialmente en la zona del trasero y el pecho. Asimismo, durante estos meses aumentará el tamaño y el peso del pecho, por lo que la mejor opción será optar por trajes de baño con tirantes regulables, para que no acabe sintiendo dolor o incomodidad en la zona de los hombros.
En cuanto al modelo, hay mujeres que preferirán optar por trajes de baño lisos, otras por los estampados, ya que dependerá también de su propio estilo. Del mismo modo, también hay diferentes modelos, ya sean bañadores completos que tan sólo tienen de especial el lugar para la tripa, los bikinis o los llamados tankinis, que últimamente se han puesto de moda y que están compuestos por dos partes, una braguita y una camiseta. Es una opción intermedia, ya que, aunque tiene dos partes como los bikinis, la zona de la barriga va tapada.
No estamos como hace 20 años, ahora es totalmente normal usar un bikini durante el embarazo
Y es que, en los últimos años la moda de baño enfocada a las futuras mamás ha evolucionado mucho y también la sociedad en general, ya que, quizás hace años, tan sólo existían bañadores que tapaban la barriga y en la actualidad son muchas las mujeres que siguen apostando por el bikini dejando su tripita al aire.
Además, también hay ciertos trucos a la hora de elegir el modelo. Y es que si la mujer tiene las piernas cortas, para alargarlas visualmente, deberá apostar por bañadores escotados en la zona del muslo. Por otro lado, si el problema es que se ve demasiado pecho, deberá optar, por ejemplo, por bikinis en dos tonos, lo más oscuro para la parte de arriba y lo claro para la inferior. En cambio si lo que no le gusta es que se le vean las caderas anchas podrá desviar la mirada hacia el pecho, con bañadores que tengan en esta zona colores o texturas más llamativas.