Los primeros meses de vida del bebé requieren mucha dedicación por parte de la mamá, al principio el pequeño no se ajusta a ningún horario y demanda atención para comer o dormir en cualquier momento. Durante la noche, por ejemplo, los padres suelen levantarse varias veces hasta que el bebé adquiere un buen ritmo de sueño.
Los expertos recomiendan pasar al niño a su habitación, alrededor del año de edad, aunque son muchos los padres que los mantienen más tiempo compartiendo estancia para complacer al bebé o por propia comodidad.
¿Cómo preparar la habitación de los padres para la llegada del bebé?
Tener a un pequeño huésped en la habitación puede resultar muy gratificante, aunque si se carece de cierta organización, el caos y el desorden puede invadir en poco tiempo la estancia, aumentando con ello el estrés de la mamá.
Algunas ideas para este fin pueden ser:
– Agrupar los elementos del bebé de forma ordenada
Para conseguir un efecto ordenado y práctico, conviene colocar los muebles del bebé separados de los restantes. Puede emplearse una única pared para apoyar la cuna, el cambiador y los accesorios del niño, dejando los de matrimonio en la zona opuesta.
– Decoración para delimitar el espacio
La decoración puede ser útil a la hora de separar la zona del bebé, pintar su pared en un tono pastel, colgar un cuadro con motivos infantiles, letras con su nombre sobre la cuna o una cenefa adhesiva, son algunas ideas para ello. También puede colocarse una barra sujeta al techo para colgar una cortina de tela fina que diferencie ambos lugares.
Los colores anteriores de la habitación no tienen por qué modificarse, simplemente se trata de elegir un tono pastel que combine adecuadamente para la zona del bebé.
Hoy en día existen muebles con doble funcionalidad, cunas convertibles en cama, cambiadores que sirven de cómoda con cajones o estanterías con barra para colgar la ropita del bebé. También resulta muy práctico colocar baldas en la pared, donde situar cestos con los utensilios más utilizados (pañales, toallitas, colonia, peine..etc)
En las habitaciones que cuenten con amplio espacio, no está de más incluir en la esquina, un silloncito o mecedora cómoda para amamantar y dormir al recién nacido.
– Seguridad
La seguridad del bebé siempre debe tener prioridad y hay que valorarla detenidamente. Es importante evitar cables de electricidad u otros cercanos al bebé, en pocos meses su curiosidad le llevará a tirar de todo aquello que sobresalga de la pared. Conviene fijar las estanterías, espejos u otros muebles que se puedan volcar, cubrir los enchufes y retirar elementos como cajas o baúles cerca de las ventanas con el fin de que el bebé no tenga la tentación de asomarse a ellas.
– Ambiente
El bebé necesita un ambiente tranquilo para su adecuado descanso, conviene evitar la televisión o la música dentro de la habitación mientras el pequeño esté compartiéndola. También puede hacerse uso de cortinas para atenuar la luminosidad en las horas de descanso.