Habría que precisar de qué tipo de tratamiento estamos hablando pero en general no solo se puede, sino que se debe acudir al dentista estando embarazada para comprobar el estado de la boca, realizarse una limpieza y si es preciso, alguna intervención.
Durante el embarazo los cambios que se producen en el organismo afectan también a la boca y los dientes.
Es habitual que aparezcan nuevas caries y más habitual todavía la inflamación de las encías por el efecto de las hormonas. Las caries no están directamente relacionadas con el embarazo pero si que hay ciertos factores que favorecen el que se manifiesten en muchas mujeres. Hay un cambio de hábitos alimentarios, además ciertas bacterias se incrementan en esta etapa a lo que se suma que la saliva se vuelve más ácida. Todo ello crea un ambiente más propenso a la aparición de caries. Por otro lado la inflamación de las encías o gingivitis es otra de las molestias habituales en la embarazada. Se enrojecen y sangran con facilidad por ejemplo cuando se cepillan los dientes.
El cuidado de la boca en el embarazo es muy importante
Todos estos factores hacen necesario que la mujer acuda al dentista cuando se queda embarazada, el especialista valorará la salud bucal de la mujer con el fin de prevenir futuras complicaciones. Una limpieza inicial es la medida más socorrida para afrontar estos cambios de la mejor forma posible. Además en casa se deberá extremar el cuidado de los dientes, es el momento de abusar de la seda dental y de utilizar enjuagues bucales.
Pero además de la limpieza hay otros tratamientos que se pueden llevar a cabo sin problemas. Uno de los factores que más preocupa es la anestesia pero no hay problema con ella, incluso es posible realizar radiografías, la zona a la que se dirige la radiación está alejada del abdomen, es además una cantidad muy pequeña por lo que el riesgo es mínimo. También es posible tomar algunos antibióticos si es necesario. De todas formas hay profesionales que prefieren dejar este tipo de pruebas para después del parto si no es algo urgente. En general y a no ser que sea necesario, los tratamientos que puedan conllevar algún riesgo se dejan para después del primer trimestre, a partir de ahí se pueden llevar a cabo sin problema (siempre bajo prescripción médica).
Recomendaciones para el cuidado de la boca
Lo recomendable es no descuidar la higiene bucal durante todo el embarazo. La mujer debe ser más insistente con el cuidado de sus dientes, cepillándolos más a menudo y estando atenta ante cualquier cambio o molestia. En este proceso será muy importante mantener una dieta equilibrada sin abusar de los alimentos que pueden favorecer la aparición de caries. Al menos se deberá realizar una visita al dentista durante estos nueve meses para realizarse una limpieza y recibir la ayuda precisa en el caso de que haya alguna complicación.
Una boca en buen estado no solo será beneficiosa y evitará problemas a la madre, además también se reduce el riesgo para el bebé al disminuir las bacterias que se le transmiten.