No hay nada que demuestre que un sujetador con aros u otra prenda interior de este estilo pueda resultar perjudicial para la mujer embaraza. Pero sí que se debe tener en cuenta que los pechos van a ir cambiando desde el principio del embarazo, por lo que el uso de un sujetador inadecuado puede causar molestias e incluso interferir en la normal evolución de los pechos durante estos meses.
Este es el motivo por el que hay especialistas que no recomienden este tipo de prendas durante la gestación.
Las varillas de los sujetadores pueden llegar a clavarse en el pecho y por tanto comprimir la circulación de la sangre así como los conductos de leche en esta zona, provocando molestias e incomodidades que en los peores casos pueden desembocar en una mastitis. La mastitis es la inflamación de los pechos que causa dolor y enrojecimiento en las áreas afectadas.
La mastitis causada por el sujetador sólo sucede en casos graves
Hablamos solo de los casos más graves que se darían en mujeres que usan un sujetador que les comprime el pecho durante un tiempo prolongado. Lo importante es que el sujetador se adapte a los cambio que los senos de la embarazada van a sufrir, si este sujetador lleva varillas pero es cómodo y no molesta no habría problemas en utilizarlo.
La futura madre va a ser muy consciente desde el primer momento de los cambios en su organismo, concretamente el pecho es una de las zonas que primero se ven afectadas. A partir de las seis semanas de embarazo se empiezan a percibir estos cambios. Los pechos están más sensibles, han crecido y duelen al roce. En este primer trimestre es habitual apreciar bultos en los senos, esto es debido a que los conductos de leche se están activando para cumplir su función. La mujer también podrá notar como las venas se hacen más prominentes, durante la gestación aumenta el volumen de sangre y esta mayor circulación sanguínea se hace patente también en el pecho. El pezón y la areola se tornar más oscuras, haciéndose así más visibles para el bebé que está en camino.
Ten en cuenta que es muy importante el que vayas cambiando el tamaño del sujetador conforme avanza el embarazo
Conforme pasen los meses estos cambios se mantendrán, los pechos aumentarán en más de un kilo su peso habitual y en casi 4 centímetros de tamaño. Esto pone de manifiesto la importancia de utilizar un sujetador adecuado para evitar interferir en este proceso natural.
Lo más recomendable es utilizar un sujetador de tirante ancho, que pueda aguantar el incremento de peso sin molestar a la madre. Los ajustes de la espalda deben ser regulables para poder ir adaptándose a los cambios y la copa debe de tener un buen refuerzo. El hecho de que incluyan varillas o no dependerán de las preferencias de la mujer que siempre debe optar por la comodidad. Con todo, lo normal será cambiar varias veces de talla y modelo a lo largo de los meses, habrá mujeres que deberán utilizar antes del parto los sujetadores de lactancia por ser los más adecuados y cómodos.