Es muy importante para el sano desarrollo de los hijos que los padres comprendan y aprendan a jugar con los niños, para establecer un vínculo más fuerte.
Los primeros 10 años de vida de una persona son durante los cuales aprendemos todas las herramientas que nos serán sumamente útiles por el resto de nuestras vidas.
Desde el aprendizaje escolar, las habilidades sociales para interactuar con sus pares y con el entorno que los rodea, los niños son como una “esponja” cuando se trata de adquirir e internalizar nuevas experiencias, y darles significado. Por ésta razón, es que la mayoría de los pediatras recomiendan que los padres aprendan a jugar con los niños, y las razones son varias.
Antes que nada, es importante que el niño establezca un vínculo fuerte con sus padres, puesto que cuánto más sólido sea éste, más fácil será para el pequeño aprender a adaptarse a las normas sociales, a su entorno y a desarrollar su creatividad e individualidad como persona en el futuro. Cuando los padres hacen que el jugar con los niños sea una tarea diaria o de alta frecuencia, no sólo comparten tiempo de calidad con ellos, sino que los están ayudando a desarrollarse como individuos y a conocerse a sí mismos.