Higiene y limpieza de los dientes de los niños

Según informa los expertos, los hábitos para el cuidado de la dentadura deberían empezar a desarrollarse cuando el bebé tiene cuatro meses, es decir, cuando deja el periodo de la lactancia y empieza a comer papillas y otras comidas. A esa edad es cuando al niño le empiezan a nacer los primeros dientes.


Vigilar la comida


El tipo de comida que se le dé puede afectar a su salud dental durante toda la vida, así que es importante tener en cuenta que tipos de comida ingiere nuestro hijo si queremos que goce de una buena salud dental.

Se ha determinado que hay una relación muy grande entre el consumo de bebidas azucaradas durante la infancia, y el consumo posterior de alimentos con gran contenido de azúcar, es decir, que los hábitos que se les da de pequeños afectara a como se desarrollen los hábitos de mayor.

El exceso de azúcar durante la infancia de nuestro hijo puede producir dependencia en el adulto, los hábitos de nutrición del adulto se forman al terminar la lactancia y a partir de ahí se van desarrollando, es por eso que es tan importante que el bebé desarrolle hábitos orientados a una buena salud dental.

Se sabe que el azúcar causa caries durante toda la vida; cuanto antes se acostumbre el bebé al azúcar, más probable será que, al llegar a adulto se sienta atraído por alimentos con exceso de azúcar y por tanto su riesgo de tener caries aumentará mucho más.


Cepillar bien los dientes


El cepillado de los dientes debe hacerse dos veces al día por lo menos, con una de las veces antes de dormir y después de la última toma del pecho, es decir con una rutina parecida al del adulto.

El niño puede cepillar los dientes por la mañana el solo, además le servirá para practicar e ir aprendiendo, pero los padres deben cepillar los dientes por la noche, ya que debemos asegurar que por la noche los dientes están perfectamente higienizados.

Al principio, muchos niños pequeños se resisten a esta rutina y resulta muy costoso, muchos necesitan que los padres les obliguen de manera que el niño no pueda evitarlo.

Como cualquier otro proceso como el de cortar las uñas el niño tendrá que ir acostumbrándose.

Es fundamental que el niño se cepillo los dientes todos los días a pesar de que resulte complicado para los padres conseguir convencerle, el niño tiene que entender que es por su bien y que es mejor para el cepillarse los dientes, pero en esto los padres deben ser firmes.

No importa que pueda parecer traumático o negativo que los padres tengan que obligar al niño a cepillarse los dientes o que tengan que hacerlo ellos aunque sea teniendo que sujetar al niño, al fin al cabo siempre será menos traumático que llevarlo al dentista y que el dentista tenga que sacarle un diente.

Al fin y al cabo la paternidad implica mucho esfuerzo y sacrificio y este es uno más de la larga lista que tenemos.