En esta cuestión no hay medias tintas o se defiende el uso del castigo como herramienta educativa o no. Habrá quien matice que no todos los castigos son iguales, que no es lo mismo un bofetón que hacerle recoger lo que ha tirado o dejarle sin televisión. Es cierto que las enseñanzas que se extraen de un tortazo son pocas pero ¿qué aprende recogiendo lo que ha tirado? ¿es que acaso recoger no es una de las cosas que tiene que hacer sin que sea un castigo? Y dejarle sin tele ¿qué le enseña? ¿a actuar correctamente solo por el miedo a quedarse sin que lo que le gusta?