Los problemas en el corazón son mucho más frecuentes de lo que puede parecer y pese a que, a priori, el saber que nuestro bebé sufre de una cardiopatía congénita, ésto es, formada ya desde antes de nacer, es fruto de una gran preocupación, los avances de la medicina ofrecen grandes garantías de que el niño va a poder llevar una vida normal.
El corazón se forma en torno a la semana cuarta del embarazo, comienza siendo una estructura tubular que poco a poco dará paso a las cavidades auricular y ventricular y a las cuatro válvulas encargadas de hacer fluir la sangre.
Los motivos por los que algo falla en este proceso son en gran parte desconocidos, no hay una causa concreta, pero sí que hay factores que pueden propiciar una malformación del corazón.