Como suele decirse “es mejor prevenir que curar”. Y es por ello que, en lo referente a la salud de los pequeños, se toman medidas de prevención, ya que, sin duda, para sus padres lo más importante es que sus hijos estén sanos y fuertes. De este modo, detectar precozmente o prevenir determinados problemas o dolencias puede hacer que se le ponga solución lo antes posible.
Así, otro aspecto importante es la detección precoz de defectos visuales en bebés y para dicha detección, la optometría pediátrica es la rama encargada de la prevención, diagnóstico y tratamiento de los problemas visuales en los niños.
De este modo, desde que el pequeño nace, a las pocas horas, el pediatra le examina para observar o descartar que exista alguna anormalidad de carácter físico.