El bruxismo no es solo cosa de los adultos. También los niños aprietan sus dientes, de manera inconsciente, hasta hacerlos rechinar cuando duermen, y esto les provoca consecuencias muy negativas a su boca, como desgaste, dolor, enfermedad en las encías y malformación en la alineación de la dentadura.
La mayoría de casos de bruxismo se da por la noche, aunque también hay muchos niños que aprietan sus dientes de manera exagerada durante el día, ya sea con rechinamiento o no de los dientes.