Cada vez son más frecuentes las visitas al pediatra para consultar por el dolor de espalda que sufren los niños. Nos parece que es algo sin ninguna razón de ser, puesto que los niños normalmente no tienen porque tener dolores de este tipo, pero no es así, muchos niños padecen este tipo de dolor.
Nos resulta más fácil entender posibles lesiones de espalda en adultos, con mucho estrés, poco descanso y en mala forma física pero lo cierto es que los niños también tienen muchos motivos para desarrollar lesiones y dolores de espalda.
Esa idea de que los niños no están sometidos a estrés es muy incierta.
Los niños de hoy en día pueden padecer estrés en muchos más casos de los que nos pensamos. La presión en el colegio, la separación de los padres, el examen de inglés… son algunos de los desencadenantes de este estrés.
El posible estrés ya de por sí puede generar problemas en la espalda pero hay más factores que no debemos perder de vista.